"Como fue el caso durante la Guerra Fría, hemos llegado a un umbral peligroso, quizás incluso más peligroso", dijo Lavrov, que acusó a las potencias occidentales de "destruir los beneficios de la globalización" con una "agresión económica" y de buscar imponer sus políticas al resto del mundo por la fuerza.
"Nadie dio permiso a la minoría occidental para hablar en nombre de toda la humanidad", insistió el jefe de la diplomacia rusa, que preside hoy una reunión especial del Consejo de Seguridad convocada por su país y dedicada al multilateralismo.