Según el periódico "Le Monde", que cita fuentes de la Presidencia francesa, los griegos no recibirán más ayuda hasta que no adopten el plan y, si finalmente se convoca el referéndum prometido por el primer ministro griego, Yorgos Papandreu, que se celebre lo antes posible y con una pregunta muy clara: si se quiere o no seguir perteneciendo al euro.
El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy; la canciller alemana, Ángela Merkel, y los presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión, Herman Van Rompuy y Jose Manuel Durao Barroso, han convocado hoy en Cannes (Francia) a Papandreu para que les explique su nueva postura frente al acuerdo de la pasada semana en Bruselas.
A la reunión asistirán también los responsables del FMI, Christine Lagarde, del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, y un representante del Banco Central Europeo (BCE).
El Gobierno francés cree que, si los griegos persisten en la idea del referéndum, deben acelerar su celebración lo antes posible y además con la única pregunta que hay que plantear: "¿Es partidario de salir de la zona euro?".
"No se les puede impedir a los griegos que se suiciden", dijo una fuente de la presidencia francesa a Le Monde, quien juzgó inimaginable que se concedan a Grecia ayudas o préstamos bilaterales tanto del FMI como de la UE si persiste esta incertidumbre.