Declaraciones del secretario de Estado de EE. UU. Antony J. Blinken sobre las elecciones presidenciales en Rusia

Las recientes elecciones presidenciales rusas se celebraron en un entorno de intensa represión de las voces independientes y de encarcelamiento, muerte o exilio de prácticamente toda la oposición política auténtica. El Kremlin ha marginado sistemáticamente a los grupos que defienden los procesos democráticos y el Estado de derecho, incluidos los observadores electorales. Las autoridades rusas también denegaron la inscripción de candidatos contrarios a la guerra a las elecciones presidenciales con falsos pretextos técnicos y no invitaron a la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa ni a ninguna organización internacional con credibilidad a observar los comicios. Estas medidas ilustran hasta qué punto el Kremlin ha negado a sus ciudadanos un proceso democrático transparente y significativo. En este contexto, estas elecciones sólo pueden describirse como no democráticas.

DEPARTAMENTO DE ESTADO DE EE. UU.
DECLARACIÓN DE PRENSA
ANTONY J. BLINKEN, SECRETARIO DE ESTADO DE EE. UU.
19 DE MARZO DE 2024

Desde la invasión a plena escala de Ucrania por parte de Rusia, el Kremlin ha intentado proyectar la ilusión de que el público ruso apoya inequívocamente su brutal guerra eliminando el espacio para el discurso cívico y profundizando su campaña de intimidación, violencia y censura contra los medios de comunicación independientes y la sociedad civil. El Kremlin organizó unas elecciones presidenciales ficticias en zonas de Ucrania ocupadas temporalmente como un ejercicio de propaganda flagrante, con la esperanza de reforzar la reclamación ilegítima de Rusia sobre las partes de Ucrania que invadió ilegalmente y que ahora ocupa. Semanas antes de las elecciones, Alexéi Navalni falleció en prisión tras años de acoso y trato cruel a manos de las autoridades rusas por sus continuos esfuerzos por fomentar una auténtica democracia en Rusia.

Vladimir Putin está privando a los ciudadanos rusos del acceso a la información, incluso para informarse sobre su participación política. Independientemente del resultado predeterminado de estas elecciones, Estados Unidos seguirá apoyando a quienes persigan un futuro mejor para Rusia.

Traducción cortesía del Departamento de Estado de los Estados Unidos