Las reuniones también tuvieron lugar con autoridades estatales y municipales de Coahuila, en el norte de México, hasta donde han llegado cientos de haitianos en busca de cruzar a Estados Unidos.
En un comunicado, el Instituto Nacional de Migración (INM), dependiente de la Secretaría de Gobernación (Interior), indicó que su titular, Francisco Garduño, encabezó un encuentro en el que "solicitó el apoyo de las instancias gubernamentales para avanzar en la resolución de los procedimientos administrativos".
Recordó que estos procesos los siguen las personas migrantes que han solicitado asilo o refugio y que también implicarían su traslado a los estados de Chiapas y Tabasco o, de ser el caso, su retorno asistido al país de origen.
En la nota se apuntó que a través del Puente Internacional Puerta de México Ciudad Acuña, Garduñó "cruzó a territorio estadounidense donde recorrió, junto con mandos de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. el perímetro donde están ubicadas las personas migrantes".
Precisó que muchos de los migrantes se han trasladado hasta esa región en núcleo familiar y provienen de diferentes países, pero una mayoría es originaria de Haití.
Además, el titular del INM recorrió en un aerobote el cauce del río Bravo, para conocer las condiciones migratorias que existen a lo largo de embalse fronterizo.
Ante medios que cubren la crisis migratoria en la frontera de México-Estados Unidos, Garduño informó que del lado estadounidense se ubican alrededor de 3,300 personas migrantes.
Mientras que del lado mexicano hay aproximadamente 600 migrantes a quienes, dijo, se les otorgarán todas las facilidades para continuar con los trámites iniciados ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informó esta semana que emitió medidas cautelares para proteger los derechos e integridad de las personas migrantes varadas en Ciudad Acuña, Coahuila.
Además, personal de la CNDH mantiene presencia permanente en dicho lugar para otorgar orientación jurídica y atender quejas por presuntas violaciones a derechos humanos de los migrantes.
El sur de México registra en los últimos meses un flujo migratorio histórico con 147,000 indocumentados detectados en México de enero a agosto, el triple de 2020, y un récord de 212,000 indocumentados detenidos solo en julio por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) de Estados Unidos.
Hace una semanas, desde Tapachula, municipio del suroriental estado de Chiapas, salieron cuatro caravanas de migrantes -muchos de ellos haitianos-, pero todas fueron desarticuladas en duros operativos de las fuerzas de seguridad.