"En todas partes y de manera insidiosa, el odio y la misoginia sutil, y a veces no tan sutil, la misoginia dentro y fuera de internet, están casi normalizados", señaló al inaugurar el 57º periodo de sesión del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra.
Expuso, como datos concretos, que las mujeres experimentan tasas de pobreza más elevadas que los hombres en la mayor parte del mundo, y que la violencia de género, incluida dentro de la pareja, es muy frecuente, pero suele permanecer oculta.
"La justicia para las víctimas y los esfuerzos de prevención son inadecuados, lo que contradice la promesa de que todos los seres humanos nacen libres e iguales", comentó.
Destacó que el ejemplo más grave de todo esto es la situación que padecen las mujeres en Afganistán, donde los talibanes aplican normas que están terminando de borrarlas de la vida pública.