El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dijo que se tomarán en cuenta todos los elementos que han aparecido en los últimos días, después de que una testigo declarara que los soldados ejecutaron extrajudicialmente el 30 de junio a los supuestos miembros de una banda delictiva cuando se habían rendido.
"El procurador ha dicho que no está cerrado este proceso, por lo tanto todas estas aportaciones, porque eso, son, aportaciones, tienen que entrar dentro de la investigación completa e integral", dijo Osorio Chong a Radio Fórmula.
Posterior a la declaración del ministro, la procuraduría general emitió un comunicado en el que aseguró que realiza una investigación en la que participa "un equipo de especialistas en diversas disciplinas".
"La seriedad con que esta administración toma en cuenta, tanto la aplicación de las reglas elementales en el procedimiento de búsqueda de la justicia, obliga a una investigación completa y profunda para llegar a la verdad", indicó la procuraduría general al tiempo que dijo que su responsabilidad es "precisar con claridad si las conductas del caso se apegaron a derecho, y con respeto absoluto a los derechos humanos".
Organizaciones de derechos humanos como Human Rights Watch y Amnistía Internacional (AI) han exigido una investigación exhaustiva e imparcial de la supuesta matanza, que en principio las autoridades informaron se trató de la muerte en un enfrentamiento entre militares y delincuentes.
A su vez, la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México, un organismo público independiente que analiza violaciones a las garantías fundamentales cometidas por funcionarios o militares, dijo a dpa que tiene en marcha su propia investigación.
"Hemos estado en el lugar de los hechos, hemos recabado los testimonios de tres personas que estuvieron en los hechos y los dictámenes que constan en la averiguación previa de la Procuraduría General como necropsias", afirmó el segundo visitador del organismo, Marat Paredes Montiel.
"Estamos integrando un expediente para esclarecer los hechos", declaró.
La revista "Esquire" de México reveló esta semana, en un adelanto de un reportaje que saldrá en octubre, el testimonio de una testigo que afirmó que el Ejército primero interrogó a los presuntos delincuentes y luego los mató, pese a que se habían entregado.
"Se rindieron, definitivamente se rindieron", dijo la mujer. "Entonces les preguntaban cómo se llamaban y los herían, no los mataban. Yo decía que no lo hicieran, que no lo hicieran, y ellos decían que 'esos perros no merecen vivir'. Luego los paraban así en hilera y los mataban. Estaba un lamento muy grande en la bodega, se escuchaban los quejidos", afirmó.
La versión oficial sobre la operación, realizada en San Pedro Limón, en el municipio de Tlatlaya en el centro de México, indica que los soldados ubicaron a personas armadas en una bodega, donde había tres mujeres secuestradas.
Según la Secretaría de la Defensa, hubo un enfrentamiento con el resultado de 22 muertos y un militar lesionado, pero uno de los factores que ha generado suspicacias es la desproporción entre el número de muertos o lesionados de un bando y el otro.
Osorio Chong afirmó que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto no está pensando en "tapar lo que salga de esta investigación". "Claro que sí nos importa y claro que sí nos interesa", dijo el ministro de Gobernación.
El funcionario señaló, sin embargo, que los nuevos elementos podrían ser en algunos casos "contradictorios" por lo cual se debe dejar que la fiscalía "haga todas las investigaciones y si siguen saliendo elementos, qué mejor para llegar a la verdad, cualquiera que esta sea".