Desde el primer momento, la Dirección General de Pemex instruyó a brindar todas las facilidades y el apoyo para el adecuado desarrollo de la investigación hasta llegar a las últimas consecuencias.
Esta denuncia se refería a la licitación convocada por Petróleos Mexicanos para servicios de alimentación y hotelería en plataformas habitacionales en la Sonda de Campeche.
Supuestamente los acusados solicitaron a dicha empresa 10 millones de pesos en efectivo así como dos camionetas para “apoyar” el desarrollo del contrato.
Derivado de tales pesquisas, la denuncia de estos hechos fue presentada el 25 de junio ante el Ministerio Público por la Secretaría de la Función Pública en coordinación con la empresa Súper Pereyra.
Al día siguiente se implementó un operativo por parte de la SFP, con el apoyo de Pemex y la PGR, dando como resultado la detención de tres personas en un restaurante de Polanco, uno de ellos trabajador de Pemex.
Tres días después el Ministerio Público consignó por extorsión a los detenidos, a quienes el pasado domingo 5 de julio se les dictó auto de formal prisión por el delito de extorsión.
Se continúa con las investigaciones a fin de determinar si existe algún otro servidor público involucrado.