Josef Newgarden (Team Penske) volvió a beber el mítico galón de leche que corona al campeón de las 500 Millas de Indianápolis por segundo año consecutivo en una carrera magnífica que se definió en la última vuelta y dejó al mexicano Pato O’Ward (Arrow McLaren) segundo, con la miel en los labios al entrar líder en el penúltimo paso por meta.