La moda sigue siendo una de las industrias más contaminantes, ya que se queman combustibles fósiles en las diferentes etapas de la producción y para comenzar a reducir la contaminación de la que son responsables deben invertir al menos el 2% de su presupuesto anual para la transición de combustibles fósiles hacia las energías renovables, según un estudio de la organización Fashion Revolution.