Afirmó que el desarrollo económico y social alcanzado por México “muestra grandes disparidades” a nivel local porque las políticas de desarrollo regional se han caracterizado por la falta de inversiones, esquemas centralizados, el exceso e ineficacia normativa y la ausencia de acuerdos sociales, políticos y de participación ciudadana.
El legislador por Guerrero dijo que con frecuencia se confunde el comportamiento de la economía en su conjunto con la de los estados y municipios y pareciera que estuvieran perfectamente integradas, pero en la planeación nacional no se toman en cuenta las necesidades regionales.
La concentración económica y la ausencia de mercados locales, enfatizó, han ocasionado la distribución inequitativa de recursos, el aumento de zonas de pobreza y la desaparición de comunidades que emigran a otras ciudades al interior de nuestro país o al extranjero.
Juárez Cisneros resaltó que uno de los problemas que dificultan la ejecución de los planes de desarrollo es la carencia de mecanismos administrativos adecuados y un federalismo funcional, eficiente, solidario y transparente.
Ante este panorama, propuso reformar el artículo 26 de la Constitución para que el Ejecutivo federal promueva la participación de las entidades, los municipios y pueblos y comunidades indígenas, en la construcción del sistema de planeación democrática del desarrollo nacional y regional.
Consideró como “impostergable atender un reclamo social histórico para que el Estado mexicano, en su estructura jurídica y normativa, tenga como resultado el cambio de la realidad actual de sus regiones, estados, municipios y zonas metropolitanas”.
Esta iniciativa se analizará en las Comisiones de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos Segunda de la Cámara de Senadores.