"Kim me enerva, porque no cumple los programas", dijo a dpa Lugner, de 81 años. También contó que su segunda invitada Sarcos no concurrirá, ya que perdió su vuelo en París.
La estrella de televisión estadounidense Kardashian plantó la noche anterior a su anfitrión y prefirió ir con su madre Kris Jenner a un conocido restaurante.
Y volvió a causar impacto en la conferencia de prensa conjunta, al anunciar que no bailará con Lugner como estaba previsto. En su lugar danzará su madre, indicó la californiana de 33 años. "Prefiero mirar mientras bailan".
La 58 edición del baile de la ópera de Viena convocará a más de 5,000 invitados, aunque la atención mediática recae normalmente en las invitadas de Lugner. En la lista se encuentra también el ex secretario general de las Naciones Unidas Kofi Annan, como huésped del presidente austriaco Heinz Fischer.
Poco antes del baile cientos de fans de Kardashian se dieron cita en el centro de compras de Lugner, donde aguardaron a la estrella estadounidense.
Rodeada por numerosos guardaespaldas, durante algunos minutos Kardashian se dedicó a firmar autógrafos, enfundada en un largo vestido blanco.
Previamente reveló uno de los "secretos" de su belleza. "Amo los tratamientos con láser", señaló Kardashian, de 33 años. De esta manera la joven madre se trató recientemente las estrías del embarazo de su hija North, que tiene unos ocho meses.
Kardashian -que viaja con guardaespaldas, peluquería y equipo propio de cámara- tuvo algunas palabras amigables hacia su anfitrión, quien desembolsó un honorario no revelado para asegurar la presencia de la estrella.
"Me siento muy honrada de haber sido invitada a este evento extraordinario", manifestó. "Estoy tan emocionada". Lugner es amable y un buen anfitrión, añadió.
El empresario se decantó por Kardashian ante la escasa resonancia de su invitada estrella del año pasado, la ganadora de un Oscar Mira Sorvino (Mighty Aphrodite).
En ediciones anteriores, acompañaron al empresario Sophia Loren, Pamela Anderson o Paris Hilton. (DPA)