En un comunicado a la Comisión de Mercado de Valores Mobiliarios (CNVM), Galp atribuyó el retroceso al aumento de los costes financieros, así como a la fuerza del aumento de amortizaciones, depreciaciones y provisiones.
De esta manera, los beneficios antes de impuestos, intereses y amortizaciones (Ebitda) se situaron en terreno positivo, en los 557 millones de euros, un 13.9 por ciento más respecto al semestre del año anterior.
El resultado operativo neto (Ebit) fue de 299 millones de euros, con un crecimiento del 7.8 por ciento en comparación con el mismo período de 2012.
Las ventas cayeron un 2.7 por ciento, hasta los 9,095 millones de euros, pero la compañía disminuyó los costos operacionales en un 3.6 por ciento, hasta los 8,563 millones de euros.
La empresa destaca que el negocio de distribución de los productos petrolíferos se volvió a ver afectado por la caída de la demanda en la Península Ibérica.
El volumen de negocio en España cayó un 6 por ciento y el de Portugal descendió un 4 por ciento, aunque la compañía subraya que la disminución fue menor que la registrada en el primer trimestre del año.
Galp dedicó un 34 por ciento más a la inversión, hasta los 474 millones de euros, de los que un 70 por ciento se destinaron a la división de exploración y producción desarrollada en sus actividades en Brasil.
La petrolera, que cuenta con una plantilla de 7,489 trabajadores, es una de las mayores compañías de Portugal y es pieza clave de las exportaciones lusas, según los datos facilitados por la propia empresa.