La curva de la deuda estadounidense se invierte y aviva el miedo a recesión

La curva de la rentabilidad de los bonos del Tesoro estadounidense se invirtió este jueves por tercera vez desde la semana pasada, haciendo las obligaciones a dos años más rentables que aquellas a diez años, lo que tradicionalmente se ha considerado un síntoma de recesión a uno o dos años.

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El presidente estadounidense, Donald J. Trump.

A las 10:50 hora local (14:50 GMT) la rentabilidad de la deuda estadounidense a dos años era del 1,596 %, en tanto que los rendimientos de la deuda a 10 años era unas milésimas porcentuales inferior, del 1,594 %, pero suficiente para conseguir que el Dow Jones de Industriales, el principal indicador de la Bolsa neoyorquina, se fuera al rojo.

El hecho de que la deuda a dos años resulte más rentable que a diez significa que los inversores ven un mayor riesgo en la economía en el corto plazo que a largo y tradicionalmente se ha visto como un síntoma de recesión.

La "curva invertida" de este jueves vino motivada por unas declaraciones de que dos presidentes de dos importantes bancos del sistema de la Reserva Federal (Fed), el de Kansas y el de Philadelphia, se mostraran contrarios a recortes adicionales en los tipos de interés del dólar, tras reducirlos en un cuarto de punto el mes pasado.

"Con esta tasa de desempleo tan baja, los salarios en crecimiento y la inflación cercana al objetivo de la Fed, creo que estamos en un buen lugar en relación a las metas que se nos pide conseguir", dijo la presidenta de la Fed de Kansas, Esther George, en una entrevista a la cadena especializada CNBC.

El miedo entre los inversores a que la Fed no actúe con la suficiente celeridad para hacer frente a una posible recesión bastó para invertir de nuevo la curva de la deuda.

Según el analista de Investing.com, Ismael de la Cruz, "desde que el indicador avisa de la llegada de una recesión hasta que ésta se confirma oficialmente y se materializa, transcurren uno o dos años".

Además, explica de la Cruz, "el aviso del indicador no impide que la Bolaa siga subiendo los 11 meses siguientes como media", aunque advierte que las medidas extraordinarias en política monetaria de los Bancos Centrales, como la compra masiva de bonos, ha distorsionado el precio de los mismos.