En concreto, Italia adjudicó los 3,500 millones de euros que ofrecía en títulos de deuda del tipo CTZ a 2 años, a un interés del 4,037 por ciento, casi siete décimas por encima del 3,355 por ciento fijado en la última subasta de deuda de este tipo el 24 de abril pasado.
Colocó además, en una ampliación de oferta, 332.5 millones de euros en bonos del tipo BTP a 10 años vinculados a la inflación europea y con vencimiento en 2017, a un rendimiento del 4.6 por ciento, 0.72 puntos porcentuales por encima del 3.88 por ciento registrado el mismo 24 de abril.
Además se adjudicaron 417.5 millones de euros también en bonos BTP a 5 años vinculados a la inflación europea y con vencimiento en 2016, con un rendimiento del 4.39 por ciento (de estos no se puede establecer una comparación directa pues están fuera de emisión).
La demanda en el caso de los bonos a 2 años fue de 5,795 millones de euros, 1.65 veces superior a la oferta máxima ofrecida y adjudicada, que era de 3,500 millones de euros.
En el caso de los bonos a 10 años, las peticiones fueron de 876.5 millones de euros, 2.63 veces la cantidad máxima ofrecida (332.5 millones), mientras que en el de los títulos a 5 años fue de 958 millones de euros, 2.29 veces más que los 417.5 millones de euros que se sacaban al mercado.
Esta era la primera de las tres subastas de deuda previstas por el Tesoro italiano para esta semana, en la que pretende conseguir financiamiento por un valor de entre 16,000 y 19,000 millones de euros en bonos a corto, medio y largo plazo.
La cuestión se centraba en ver si Italia acusaría la incertidumbre en los mercados sobre la situación financiera en Europa o conseguiría mantener el buen resultado registrado en las subastas de mediados de este mes, en las que llegó a reducir el tipo de interés fijado por los bonos a 3 y 12 meses por primera vez desde marzo.
Mañana Italia subastará 8,500 millones de euros en bonos a 6 meses, mientras que el miércoles le tocará el turno a entre 4,500 y 6,250 millones de euros en bonos a 5 años (hasta 3,500 millones de euros) y a 10 años (un máximo de 2,750 millones de euros).