Musk también aseguró durante la reunión anual de accionistas de la compañía, que se desarrolló junto a un evento denominado "Día de la Batería", que este año Tesla entregará entre un 30 y un 40 % más vehículos que en 2019, lo que supone un total de alrededor de 500,000 unidades.
Hace tres años, Musk ya afirmó que Tesla produciría 500,000 unidades al año en 2018. Pero en esta ocasión, las afirmaciones del excéntrico empresario parecen estar más cercanas a la realidad tras superar los cuellos de botella en la producción de vehículos que aquejaron a la compañía hasta hace un par de años.
Musk declaró que en 2019 Tesla creció un 50 % y que "creo que vamos a hacerlo muy bien 2020, probablemente entre el 30 y 40 % de crecimiento, a pesar de mucha circunstancias muy difíciles".
Musk también aseguró que Tesla empezará a producir la nueva batería, denominada 4680, en una instalación cerca de su planta de montaje de Fremont (Estados Unidos) a finales de 2021.
La nueva batería es más grande que las que Tesla actualmente utiliza, y que son producidas por Panasonic y otros fabricantes, y está diseñadas para aprovechar mejor las características térmicas lo que podrá incrementar la autonomía de los vehículos.
Según Musk, la planta inicial de la nueva 4680 producirá para finales de 2021 el equivalente a 10 gigavatios/hora, cantidad que se sumará a los 100 gigavatios/hora que Tesla adquiere en la actualidad a sus proveedores.
La Gigafactoría que Tesla y Panasonic tienen en el estado de Nevada produce unos 35 gigavatios/hora.
La nueva batería, cuyo diseño no está totalmente terminado ni tampoco su proceso de producción, es uno de los elementos claves para cumplir una de las promesas iniciales de Musk: la producción de un vehículo realmente asequible a la mayoría de los consumidores.
El empresario aseguró que "en tres años, estamos convencidos que podemos producir un vehículo eléctrico de 25,000 dólares que también es totalmente autónomo".
Aunque Musk se comprometió a que el Model 3 sería un vehículo de 35,000 dólares, Tesla sólo mantuvo ese precio durante un corto plazo y en la actualidad, el vehículo más barato del fabricante tiene un precio real de 50,000 dólares, un 43 % más de lo inicialmente anunciado.