Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en febrero ganaron 38 centavos con respecto al día anterior, cuando el crudo de referencia en EE.UU. había retrocedido un 1.3 %.
Según los analistas, el barril de Texas se vio beneficiado por el plan de estímulo aprobado en el país, que se espera pueda ayudar a la demanda de combustible, muy mermada como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
También por las perspectivas de que finalmente se aumenten de 600 a 2,000 dólares los depósitos directos a ciudadanos contemplados en el paquete, tal y como ha reclamado el presidente estadounidense, Donald Trump, y como ha aprobado la Cámara de Representantes.
Por ahora, el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, ha bloqueado la votación de esa subida, aunque cada vez hay más legisladores de su partido que apoyan el aumento.
Los expertos apuntaron también a las expectativas de un descenso semanal en las reservas de crudo nacionales de en torno a 2,1 millones de barriles, según las encuestas preliminares, lo que ayudó a impulsar el precio a lo largo de la jornada.
Los contratos de gasolina con vencimiento en enero subieron dos centavos, hasta 1.39 dólares el galón, y los de gas natural para entrega el mismo mes ganaron 16 centavos hasta 2.47 dólares por cada mil pies cúbicos.
