A las 09:05 hora local (14:05 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en febrero perdían 28 centavos con respecto al cierre de la jornada anterior.
Tras acabar el miércoles con subidas sólidas, el crudo de referencia en Estados Unidos tendía a la baja en una sesión que será más corta de lo habitual y que antecede a un festivo en el que los mercados permanecerán cerrados.
Con pocas operaciones, se hacían notar las ventas de algunos operadores preocupados por el destino del rescate de 900,000 millones de dólares aprobado por el Congreso estadounidense y que el presidente saliente, Donald Trump, ha amenazado con bloquear.
Trump, que calificó el paquete de estímulo de "vergüenza" y exigió ayudas más elevadas para los ciudadanos, está retando a su propio partido, que ha sido el más reticente a dar pagos directos importantes a millones de contribuyentes.
De hecho, los demócratas de la Cámara Baja ya han adelantado que van a tratar de modificar el paquete este jueves para elevar de 600 a 2,000 dólares las ayudas directas, tal y como ha reclamado Trump, aunque se prevé que los republicanos frenen esa iniciativa.
Además, el mercado seguía pendiente del aumento de casos de coronavirus en Estados Unidos y Europa, que preocupa a los inversores por los efectos que pueda tener en la demanda de crudo, que sigue en niveles bajos por la pandemia.
El miércoles, el precio del petróleo se había beneficiado de las noticias de una inesperada bajada en las reservas de petróleo y gasolina estadounidenses, lo que apunta a que el consumo de combustible está por encima de lo previsto.