El primer ministro galo, François Fillon,justificó en conferencia de prensa la rebaja de sus perspectivas para "tener en cuenta el deterioro de nuestro entorno económico" y a continuación aseguró que espera una recuperación en el conjunto de la zona euro, "y en particular en Francia desde finales del primer semestre".
Para sustentar esas proyecciones, indicó que en enero han mejorado los resultados de las encuestas a las empresas por primera vez desde septiembre.
El primer ministro, que detallaba las medidas contra la crisis presentadas anoche por el jefe del Estado, Nicolas Sarkozy, dijo que las nuevas cifras de crecimiento tendrán un impacto de 5,000 millones de euros en las cuentas públicas, pero que no será necesario un nuevo ajuste.
La razón principal es "el buen resultado del déficit de 2011", que se quedó "por debajo del 5.4 por ciento" del Producto Interior Bruto (PIB), inferior al 5.7 por ciento esperado, y eso supone "al menos 3,000 millones" de euros de margen.
El resto, hasta los 5,000 millones necesarios para mantener el compromiso de un déficit del 4.5 por ciento en 2012, saldrá de los 300 millones de euros suplementarios conseguidos gracias a la lucha contra la evasión fiscal, a los 500 millones de euros por la aplicación de una nueva tasa sobre las transacciones financieras y por la anulación de dotaciones presupuestarias.
Fillon indicó que la nueva previsión de crecimiento para este año figurará en el proyecto de ley que su Ejecutivo presentará el próximo día 8 de febrero para actualizar los presupuestos, y que también incluirá diversas medidas de las anunciadas ayer por Sarkozy.
Entre esas destaca un aumento del IVA y de la CSG (Contribución Social Generalizada) para compensar una reducción de las cotizaciones que pagan las empresas por sus trabajadores.