El gigante del entretenimiento estadounidense reportó una facturación de 91,361 millones de dólares en los doce meses terminados el 28 de septiembre, un 3 % más interanual, según un comunicado.
Por segmentos, registraron más ingresos este año que el anterior, liderados por el de entretenimiento (41,186 millones de dólares, un 1 % más) y deportes (17,619 millones, un 3 % más) mientras que el de experiencias bajó un 5 %, con 34,151 millones de dólares.
En el cuarto trimestre -el que más seguían hoy los analistas de Wall Street- la compañía registró un beneficio neto de 460 millones de dólares, un 74 % más respecto al mismo tramo de 2023, y una facturación de 22,574 millones de dólares, un 6 % más interanual.
Los buenos resultados de su último trimestre se debieron principalmente al estreno teatral de sus películas 'Deadpool & Wolverine' y la animada 'Inside Out 2', que batieron récords de taquilla y supusieron 316 millones de dólares de beneficios para el segmento de ventas de contenidos, detalla la empresa.
Por otro lado, en el cuarto trimestre la compañía tuvo un aumento de 4.4 millones de dólares de suscriptores en su plataforma de 'streaming' Disney +, lo que coloca el total de suscriptores en 174 millones.
Bob Iger destacó el rendimiento de Disney en el cuarto trimestre, "con una mejora de la rentabilidad en nuestros negocios de 'streaming', un récord de 60 premios Emmy para la empresa y el buen rendimiento de los deportes en directo".
La división de servicios "directos al consumidor", que engloba a las plataformas de "streaming", ha acumulado 134 millones de pérdidas este año, un 94 % menos que las del año anterior.
Por otra parte, la empresa prevé para el ejercicio fiscal 2025 un crecimiento de su beneficio por acción de un solo dígito, además de una posible caída de ingresos de 130 millones de dólares en su división de experiencias debido a los huracanes Milton y Helene.
Por otra parte, Disney atraviesa ahora un momento de reestructuración interna, pues el nuevo consejero delegado Bob Iger pretende ceder la empresa a un sucesor a principios de 2026.
Los resultados, que hicieron superar ligeramente las expectativas de los analistas, impulsaron las acciones de Disney un 6 % tras el cierre de Wall Street.