Esta cifra diaria, que también será conocida como el "precio Yangshan", es una prima, denominada en dólares estadounidenses, sobre los precios internacionales que marca la Bolsa de Metales de Londres, cada vez más presente con centros de almacenamiento en la región, que pretende abrir también en China.
China es el mayor mercado mundial para la mayoría de metales industriales, pero las normas del país impiden por el momento la apertura de almacenes del mercado londinense en su territorio.
En cobre, China acapara el 40 por ciento del consumo mundial y se espera que su fuerte demanda se mantenga en los próximos años, paralela a la creciente urbanización del país, que conlleva proyectos de construcción en infraestructuras en los que el metal es muy requerido, sobre todo para electrificaciones.
La nueva Prima de Cobre de Yangshan aprovechará desde ahora la actividad libre de impuestos ya existente en el puerto chino, ubicado en un archipiélago a una veintena de kilómetros de la costa, para fijar sus propios precios diarios del metal, que se decidirán por los acuerdos cerrados allí cada día.
"Su puesta en marcha ayudará a que Yangshan pase de ser un simple puerto marítimo a convertirse en un centro de adjudicación de recursos y fijación de precios, como una repetición del éxito de Rotterdam y Londres", aseguró Wang Xinling, subdirector de la Administración de Zonas de Libre Comercio de Shanghái.
Según recoge hoy el diario "Shanghai Daily", Wang, cuyo organismo también supervisa el otro puerto shanghainés, Waigaoqiao, y la zona franca de su aeropuerto de Pudong, destacó que el nuevo indicador se convertirá en un derivado financiero en el futuro.
Entre Yangshan, Waigaoqiao y Pudong se canalizó el año pasado la tercera parte de las importaciones de cobre de toda China.
El año pasado, Shanghái puso en marcha un programa que permite a las firmas registradas en sus zonas francas incrementar su liquidez utilizando los metales almacenados en Yangshan como aval.
La zona de libre comercio de Yangshan tiene capacidad para almacenar cerca de 1,7 millones de toneladas de metales no ferrosos, en un área de 200.000 metros cuadrados.
El inmenso puerto, que cuanto esté completado tendrá la mayor terminal de contenedores del mundo, está a 23 kilómetros de la costa china, a la que está unida por un largo puente marítimo, y tiene un calado medio de 16 metros, una profundidad que permite atracar a los mayores buques del planeta y que es el doble de la de Waogaoqiao.
La Bolsa de Futuros de Shanghái compite con la de Metales de Londres en productos como cobre y aluminio, por lo que tiene planes para abrirse a la participación extranjera y extenderse también con puntos de almacenamiento y entrega en otros países.