El banco aseguró que comenzará la compra a partir del 1 de agosto y que esta se prolongará 30 días laborables.
En concreto, especifica que 14,800 millones se corresponden al pago de bonos estructurados y 2,800 millones a títulos de deuda cotizados en bolsa.
El pasado marzo, Barclays reconoció que había emitido esa cantidad de más en bonos y títulos y que tendría que recomprarlos, lo que le provocaría un impacto negativo de en torno a 600 millones de dólares.
Está previsto que la compañía anuncie sus resultados semestrales el próximo 28 de julio, donde se recogerá el impacto real de la operación.
Barclays admitió el pasado 28 de marzo que había vendido en Estados Unidos más instrumentos financieros de lo que le estaba permitido.
De acuerdo con la legislación estadounidense, Barclays solo podía vender durante un periodo de tres años bonos estructurados por un valor de 20,800 millones de dólares, si bien emitió 15,000 millones de dólares solo durante 2021.