"Larry Sanders es responsable ante todas las personas del club y ante la afición. Todos estamos decepcionados por la noticia de su suspensión", dijeron los Bucks en un comunicado.
Sanders cumplirá la sanción la próxima temporada, cuando retorne de la lesión que lo tiene alejado actualmente de las canchas.
La suspensión es el cierre de una mala campaña para el pívot, que en pretemporada firmó una renovación de contrato por cuatro años y 44 millones de dólares.
"Asumo la responsabilidad de mis acciones", dijo el jugador en un comunicado. Antes de la fractura que sufrió en la cara, que lo tiene alejado del juego, Sanders ya se perdió dos meses al comienzo de la temporada por romperse un ligamento de su pulgar derecho en una pelea en un club nocturno de Milwaukee. En los 23 encuentros que disputó promedió 7.7 puntos y 7.2 rebotes.
Los Bucks son el peor equipo de la NBA con un balance de 14 victorias y 61 derrotas.