Conocida por los romanos como "Regina viarum" (Reina de las vías, en castellano), esta vía unía la capital del Imperio con la estratégica ciudad de Brindisi (sureste de la actual Italia), el puerto más importante del Mediterráneo y punto de partida de la expansión de los romanos más allá de los mares.
"Era mucho más que una calzada militar o comercial hacia Oriente. Era sobre todo una vía de cultura para el mundo romano, y es precisamente en este aspecto cultural donde creemos que está el elemento que exigen las candidaturas de la UNESCO", afirmó hoy el subsecretario de Estado del ministerio de Cultura, Gianmarco Mazzi.
La candidatura, que pasará ahora el filtro de la Comisión Nacional Italiana para la UNESCO, es excepcional porque habitualmente este tipo de propuestas las llevan a cabo regiones, municipios o asociaciones, pero en esta ocasión la ha lanzado y coordinado directamente el Estado.
En total cuenta con la participación de 4 regiones del centro y el sur del país (Lacio, Campania, Basilicata y Apulia), 12 provincias, 73 municipios, la Comisión Pontificia de Arqueología Sacra del Vaticano y 25 universidades de italia y otros países del mundo, detalló el ministerio en un comunicado.
"También la Santa Sede participa en un proyecto tan amplio y significativo: la Vía Appia es el camino donde se construyó la primera catacumba. La recorrieron san Pablo y san Pedro para llegar a Roma", explicó el presidente de la Comisión Pontificia de Arqueología Sacra del Vaticano, monseñor Pasquale Iacobone.
Tras recibir el visto bueno de la Comisión italiana en una reunión que se celebrará el próximo 20 de enero, se enviará la candidatura al Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), el organismo asesor del Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO, con sede en París.
“Después del complejo y largo proceso de evaluación del ICOMOS, se prevé que la Vía Appia se incluya en la famosa lista durante la Sesión de verano de 2024 (junio-julio)”, según la oficina de la UNESCO del ministerio de Cultura italiano.
Más allá de la importancia "social y cultural" de la candidatura, el ministerio destacó "el fuerte impacto económico en el territorio que suponen este tipo de rutas" con una iniciativa que quiere proteger, pero también promover para el turismo, este eje neurálgico del Imperio Romano.