El canciller Meade y el director del FCE, José Carreño Carlón, inauguraron la noche de ayer martes el Centro Cultural Carlos Fuentes como sede ecuatoriana de la casa editorial mexicana.
A la ceremonia acudió con la representación del gobierno de Ecuador el canciller Patiño, acompañado de altos funcionarios de la cultura y el arte nacionales, así como destacados escritores del país andino.
Como invitada especial asistió al acto la periodista y escritora Silvia Lemus, viuda de Fuentes, así como la subsecretaria para América Latina y el Caribe de la cancillería mexicana, Vanessa Rubio, y el embajador de México en Ecuador, Jaime del Arenal Fenochio.
La sede del Centro Cultural Carlos Fuentes está situada en un histórico edificio que fue casa del expresidente Galo Plaza, antigua escuela diplomática y anterior sede de Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
El canciller Meade resaltó la presencia del FCE en Ecuador y enfatizó que el nombre de Carlos Fuentes para el recinto cultural, pone de manifiesto el interés del gobierno mexicano por estrechar los vínculos y la cooperación bilateral en diversos ámbitos.
Fuentes vivió sus primeros años en Ecuador y asistió a centros educativos del país.
Meade resaltó que el FCE es una de las editoriales más importantes de Hispanoamérica que enriquecerá la oferta cultural del Ecuador y ampliará los círculos de lectores de niños, jóvenes, adultos, intelectuales y escritores.
Meade recordó que este proyecto cultural fue uno de los compromisos de la visita de Estado que el presidente Enrique Peña Nieto realizó a Ecuador en marzo de 2014.
Para el canciller mexicano este nuevo recinto contribuirá a estrechar los vínculos entre ambos países. Desde aquí se difundirá la riqueza literaria, humanista y social de México y de los países, sostuvo.
Por su parte, el director del FCE recordó que esta filial se abre 20 años después de haber sido inaugurada la última sede de la casa editorial fuera de México.
Las últimas sedes del FCE en el exterior fueron establecidas en Estados Unidos (1990), Brasil (1991) y Guatemala (1995), todas al servicio de los autores y editores de la región.
Carreño Carlón aclaró que el FCE no llega a Ecuador a competir con las editoriales nacionales, ni con sus escritores o autores, sino para “ampliar la base de lectores y abrir el mercado a los autores de la región”.
El canciller ecuatoriano reiteró que la apertura de esta nueva filial del FCE es un hecho histórico que permitirá estrechar aún más la cooperación entre ambas naciones, en este caso en el ámbito cultural.
Con la apertura del nuevo centro cultural, el FCE consolida un importante corredor cultural a lo largo del litoral del Pacífico de América del Sur.
El corredor cultural está conformado por las sedes establecidas en Colombia, Perú, Chile y ahora Ecuador, lo que también generará un representativo mercado del libro latinoamericano, en el que el principal beneficiado será el lector, apuntó un comunicado del FCE.
La nueva casa de la editorial mexicana en esta capital alberga un centro cultural y una librería con una oferta de casi 10 mil títulos que distribuirá tanto producción del FCE como de otros fondos editoriales de Iberoamérica.