En un comunicado remitido hoy a la Bolsa de Londres, la empresa señala que su beneficio atribuido fue el año pasado de 11,582 millones de dólares (8,593 millones de euros) frente a los 25,700 millones de dólares (19,018 millones de euros) en 2011.
El beneficio antes de impuestos fue el año pasado de 18,809 millones de dólares (13,956 millones de euros), una caída del 51 por ciento frente a los 12 meses anteriores, cuando llegó a 38,834 millones de dólares (28,814 millones de euros), según BP, que publica sus resultados en dólares porque esta es la divisa en la que cotiza el petróleo.
Las ventas de BP y otros ingresos alcanzaron en 2012 los 370,866 millones de dólares (275,182 millones de euros), un ligero descenso frente a la cifra de 2011, cuando se situó en 375,517 millones de dólares (278,633 millones de euros).
BP recuerda la venta de los intereses que tenía en TNK-BP a Rosneft, así como la venta de activos en el Mar del Norte y China.
El consejero delegado de BP, Bob Dudley, ha destacado hoy las desinversiones de la empresa y el apoyo de nuevos proyectos.
"Esto sienta bases sólidas para el crecimiento a largo plazo", ha destacado Dudley, quien ha confiado en un crecimiento en 2014.
Desde el vertido en el Golfo de México en 2010, que sumió a BP en una crisis, la compañía ha vendido activos por valor de 37,800 millones de dólares (27,972 millones de dólares).
BP confía en que sus nuevos proyectos puedan empezar a dar frutos a finales de 2013, como Angola LNG, North Rankin 2 en Australia, Na Kika 3 en el Golfo de México y Chirag Oil en Azerbaiyán.
Al igual que otras compañías del sector petrolero, BP afronta altos costes e importantes gastos con el fin de mantener el aumento de su producción.