Además, pidió a las comisiones federales de Telecomunicaciones y de Competencia un informe donde detallen sus observaciones sobre dicho proyecto.
Según la petición, se contempla una inversión de más de mil millones de dólares en los primeros seis meses, luego de entregar los refrendos de la concesión para construir y operar una red nacional de servicios de banda ancha móvil con la más alta tecnología conocida como LTE (por sus siglas en inglés).
Ello permitirá conectarse a Internet, a la máxima velocidad disponible en el mundo a un precio muy accesible para millones de mexicanos, contribuyendo así a reducir considerablemente la llamada “brecha digital”, añadió.
Sin embargo, el órgano legislativo aclaró que el gobierno “no ha fijado una contraprestación acorde a estándares internacionales que se debe pagar por la explotación de la banda 2.5 gigahercios.
Esto ha provocado la que diversas empresas del ramo no puedan competir en la prestación del servicio de Internet con las firmas que ya proporcionan dicho servicio, subrayó.
Además, la Comisión Permanente advirtió que no se cuenta con la información suficiente como para emitir un pronunciamiento final sobre el tema, por lo que urge que el secretario Cordero envíe información al respecto.