En un comunicado, el secretario general del CNR, Jan Egeland, expresó este lunes su "indignación" por la grave situación que se vive en Yemen, Somalia y Sudán del Sur y otros países del África Oriental por el brote de la enfermedad, que ha colapsado los sistemas de salud.
“Los conflictos en Yemen, Somalia y Sudán del Sur han arruinado los sistemas sanitarios y los servicios de agua potable y saneamiento propagando el cólera en muchos lugares donde no se había visto antes”, indicó Egeland y agregó en Etiopía y Kenia también se han detectado brotes.
“El hecho de que (el cólera) haya vuelto de las principales causas de muerte (en esos países) en 2017 es indignante, ya que es fácilmente prevenible y tratable, por tanto, debería pertenecer sólo a los libros de historia”, indicó.
Sin embrago, admitió que aunque el cólera sea una enfermedad “fácilmente tratable”, sin la debida atención médica puede provocar la muerte en sólo unas cuantas horas, ya que la bacteria afecta principalmente al sistema digestivo causando diarreas y la consecuente deshidratación.
El CNR recordó que Yemen es el país más afectado por este brote de cólera, una enfermedad diarreica aguda que se transmite por el consumo de agua contaminada con la bacteria Vibrio cholerae, con 250 mil posibles casos, 200 detectados en promedio cada hora, y más de mil 500 muertes en dos meses.
Esto en gran medida, a que los sistemas de sanidad y saneamiento han quedado totalmente devastados por la guerra, que suma ya dos años, y la grave carencia de alimentos, lo que ha contribuido a su vez a propagar la desnutrición, provocando que “muchos yemenitas estén debilitados y sean más vulnerables a la enfermedad”, subrayó.
“Somalia ha experimentado el mayor brote de cólera en cinco años, con 763 muertes y 48 mil 607 personas diagnosticadas de cólera desde el pasado mes de enero”, detalló la declaración del CNR, citando datos oficiales de las Naciones Unidas (ONU).
En tanto, en Sudán del Sur, país que “todavía se está recuperando de la hambruna”, 163 personas han fallecido a causa de esta enfermedad, mientras que han registrado un total de cuatro mil 932 casos.
“Otros países cercanos están también afectados”, destacó el Consejo, citando como ejemplo, en Kenia, donde se han reportado cuatro muertos y 146 enfermos de cólera y Etiopía, que “si bien ha hecho progresos porque entre abril y mayo los casos han caído un 88.0 por ciento, hay 780 muertos y 35 mil 665 enfermos”, indicó el Consejo.
“Los civiles, muchos de ellos niños, no se están muriendo por heridas de guerra, sino por una enfermedad prevenible. Necesitamos agua limpia y saneamientos para las comunidades más vulnerables y más financiación para la respuesta médica”, subrayó Egeland.