En nuestro país la incidencia oscila en los 7.37 individuos por cada 10 mil recién nacidos, lo cual es alto, en comparación con otras poblaciones como la norteamericana con un índice de 2 a 3 bebés por cada 10 mil alumbramientos[2]. Esta deformación consiste en que la oreja es mucho más pequeña del tamaño habitual, por lo que no se formó correctamente. Se conocen cuatro tipos:
Tipo 1. Pabellón pequeño
Tipo 2. Tejido residual de cartílago con presencia de algunas estructuras del pabellón auricular
Tipo 3. Masa de tejido irregular sin parecido al pabellón auricular
Tipo 4. Ausencia de pabellón auricular[3]
Este tipo de malformación es más frecuente de forma unilateral, casi del 80 al 90% de los casos son así y más en el lado derecho, por lo que presentan hipoacusia conductiva; sin embargo, es importante destacar que es tratable a través de un sistema de conducción ósea, el cual consiste en colocar un dispositivo ergonómico bajo la piel que genera vibraciones y las transmite al oído interno a través de los huesos del cráneo, o por medio de una solución no implantable de conducción ósea, como el ADHEAR. señala la Dra. Jimena Atuan, Soporte Clínico de MED-EL.
En el marco del Día de la Concientización de la Microtia, conmemorado cada 9 de noviembre, es necesario poner sobre la mesa que esta patología debe ser atendida, ya que las repercusiones en la función auditiva son profundas. Además, hay que ser conscientes que la atención deberá ser multidisciplinaria para que estos pacientes puedan restablecer su audición.
Si bien este tipo de malformación se desarrollan durante la gestación, es muy importante dejar en claro que no significa que la madre haya cometido un error; se puede presentar por temas genéticos y en algunos casos, las investigaciones especializadas señalan, que las variables en algunos factores de riesgo son el consumo de medicamentos o abuso de algunas sustancias, puntualiza la especialista.
En MED-EL entendemos que lidiar con un padecimiento congénito que limita o quita la audición, puede ser complejo; sin embargo, sabemos que el oído es el único sentido reemplazable y queremos recordarles a los mexicanos que estamos aquí para apoyarlos.
[1] Secretaría de Salud, 2019
[2] Hospital Infantil de México - Federico Gómez, 2014
[3] Ibíd.