La importación de aceite de jatrofa de Senegal ayudaría a los países europeos a cumplir las medidas aprobadas por la Unión Europea para luchar contra el cambio climático, según los expertos consultados por Efe.
La normativa europea señala que los países de la UE deben usar un 20 por ciento de energía renovable en 2020, pero hasta ahora no avanzan hacia ese objetivo: "El consumo de biocarburantes ha descendido un 17 por ciento el último año", apunta el último informe de EurObserv'ER (Observatorio Europeo de Energías Renovables).
"Senegal podría convertirse en el granero de biodiésel de Europa", explica Miguel Roca, autor de un informe sobre el sector de los biocarburantes en Senegal para el Ministerio español de Economía.
Roca, que trabaja e la Oficina Comercial de España en Dakar, recordó que España tendrá que elevar a más del doble la proporción de energía renovable que utiliza para cumplir con la normativa europea.
"La jatrofa es una de las plantas más prometedoras en el mundo de los biocarburantes", indica Roca, quien señala que Senegal puede cultivarla y, además, tiene una situación geográfica privilegiada para su exportación a Europa: "Es mucho más competitiva para enviar el biodiésel a Europa que Brasil, la India o Etiopía", afirma.
Desde el puerto de Dakar, el de mayor tránsito de África occidental, un barco tarda entre ocho y quince días en transportar mercancía hasta los principales puertos españoles, explica Roca.
Para que Senegal produzca biodiésel necesita un marco regulador, del que ahora no dispone, aunque existe un proyecto de ley, pendiente desde finales de 2008, que debe ser aprobado por el Consejo de Ministros y, posteriormente, por la Asamblea Nacional.
"Muchas son las dudas sobre el funcionamiento del mercado, pese a la voluntad del gobierno de Senegal de hacer el mercado atractivo a los inversores", explica Roca.
La aprobación de la ley supondría el principio del mercado de biocarburantes con Europa, por el que algunas empresas, como las españolas "Promegal" y "Yacar Green Power", ya han empezado a apostar.
La primera de ellas, "Promegal", tiene previsto, en el plazo de tres años, una producción anual de aceite de jatrofa de 800 mil litros en las 80 hectáreas de las que dispone.
Por su parte, "Yacar Green Power" planea invertir dos millones de euros en una plantación de más de 3 mil hectáreas para producir 17 mil toneladas anuales de aceite de jatrofa, para exportar íntegramente a Europa.
Con proyectos como estos, Senegal no sólo podría convertirse en el granero de biodiésel de Europa, sino también ahorrarse cientos de millones de euros al año en importación de productos petrolíferos, en los que en 2008 gastó 747 millones de euros, según datos de la Agencia Nacional de Estadísticas senegalesa.
"Senegal tiene una gran dependencia en la generación de energía eléctrica y de transporte terrestre", recalca Carlos Álvarez, de la Empresa de Promoción de las Exportaciones de Canarias (Proexca), quien apunta que "el alza de los precios del petróleo ha hecho que la compañía estatal de electricidad Senelec haya aumentado la factura en un 30 por ciento".
"El elevado precio del petróleo y el debate sobre el cambio climático han suscitado un vivo interés por la producción de biodiésel", dijo en el II Salón de Cooperación con España, celebrado el pasado julio en Dakar, Papa Mawade, consejero de Políticas Públicas de Senegal.
Las autoridades canarias parecen haberse interesado por el proyecto y por los posibles beneficios futuros que podría aportar al archipiélago español, por lo que el Cabildo de Tenerife ha instalado un laboratorio para el cultivo in vitro de la jatrofa en Senegal y forma especialistas senegaleses en la isla.
Canarias, a medio camino entre Senegal y la península ibérica, con tres líneas marítimas que operan entre el puerto de Las Palmas y el de Dakar, podría ser el centro de las operaciones para este comercio entre África y Europa.