El gobernante afirmó en su programa semanal de radio que el nuevo marco regulador sobre los hidrocarburos le permitirá a Brasil ser propietario de sus reservas, garantizará los recursos necesarios para financiar sus principales necesidades y convertirá al país en uno de los mayores exportadores mundiales de crudo y derivados.
Lula anunciará hoy en una ceremonia especial el nuevo marco legal para la explotación de las enormes reservas petroleras descubiertas en el "pre sal", un nuevo horizonte de exploración en aguas profundas del océano Atlántico.
"Este lunes 31 de agosto representa un nuevo día de la Independencia para Brasil. Estamos hablando de un descubrimiento de petróleo de buena calidad a casi 6 mil metros de profundidad y de reservas que son muy grandes y que colocan a Brasil entre los mayores países productores de petróleo del mundo", afirmó.
Según dijo, "Brasil necesita aprovechar, hacer un nuevo marco regulador, para que (la petrolera estatal) Petrobras pueda ser más fuerte, para que el Estado pueda ser dueño del petróleo y para que podamos crear un fondo para mejorar nuestra vida, un fondo con tres vertientes básicas: cuidar de la educación, cuidad de la ciencia y la tecnología y cuidar de la pobreza en el país", agregó.
El presidente aseguró que Brasil no puede utilizar los millonarios recursos que recibirá en los gastos corrientes del presupuesto y que necesita establecer prioridades para permitir que ese petróleo convierta al país en una nación más rica y más desarrollada desde el punto de vista científico, tecnológico y educacional.
"No queremos exportar sólo petróleo crudo. Queremos exportar derivados. Y para eso necesitamos tener una gran industria petrolífera, necesitamos tener astilleros y construir las plataformas y las sondas aquí", aseguró.
Lula agregó que los recursos también tienen que ser aprovechados para construir un enorme polo petroquímico en el país.
Aseguró que el nuevo marco legal será enviado al Congreso para que la sociedad lo pueda debatir y para que Brasil pueda tener una nueva ley del petróleo que le garantice mayor participación al Estado y al pueblo.
Al contrario de la actual ley de concesiones, por la cual las empresas adquieren licencias para explotar hidrocarburos a cambio de regalías y derechos, la nueva norma prevé que el Estado tendrá participación en el petróleo extraído y que las petroleras actuarán sólo como operadoras.
La zona llamada "pre sal" comprende una franja de unos 800 kilómetros de largo por 200 de ancho que va desde el estado de Espíritu Santo (sudeste) hasta Santa Catarina (sur).
Según los cálculos oficiales, los yacimientos que ya fueron otorgados en concesión en esas áreas tienen reservas por hasta unos 80 mil millones de barriles, casi cinco veces más que las actuales reservas probadas del país.
Un 29 por ciento del área del "pre sal" ya fue otorgado en concesión a diferentes empresas, razón por la cual la nueva ley regirá para el 71 por ciento restante.