En el boletín mensual de noviembre del BCE, publicado hoy, la entidad informa de que "las expectativas de crecimiento del producto interior bruto (PIB) real a más corto plazo se han revisado a la baja para todos los horizontes, siendo la revisión más significativa la correspondiente a 2012".
La revisión a la baja se produce "fundamentalmente como consecuencia de la evolución de la crisis de la deuda soberana y de un entorno exterior peor de lo esperado", según el BCE.
Los expertos consultados por el BCE prevén ahora que la economía de la zona del euro crecerá el 1.6 por ciento en 2011, el 0.8 por ciento en 2012 y el 1.6 por ciento en 2013.
En la consulta anterior, estos expertos habían pronosticado un crecimiento del 1.9 por ciento para 2011, del 1.6 por ciento para 2012 y del 1.8 para 2013.
El BCE llevó a cabo la encuesta a expertos en previsión económica (EPE) correspondiente al cuarto trimestre de 2011 entre el 14 y el 18 de octubre de 2011.
El BCE redujo los tipos de interés en un cuarto de punto la semana pasada, hasta el 1.25 por ciento, ante la amenaza de recesión que se cierne en la zona del euro.
Es muy posible que el BCE también revise a la baja sus proyecciones de crecimiento, que dará a conocer en diciembre.
Asimismo, "los resultados de la encuesta implican unas perspectivas estables de inflación en 2011 y una revisión a la baja de las expectativas de inflación en 2012 y 2013, debido principalmente a la disminución de las presiones sobre los precios de las materias primas y al deterioro de las perspectivas de crecimiento económico", según el BCE.
En cuanto a las perspectivas de inflación a más largo plazo (para 2016), la previsión media se mantuvo sin variación, en el 2 por ciento, y la mediana de las previsiones también permaneció estable, en el 2 por ciento.