Un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones del Distrito de Columbia dio comienzo este lunes a los argumentos orales para estudiar la demanda que TikTok y su matriz china ByteDance interpusieron en mayo para evitar que una ley aprobada por el Congreso entre en vigor.
Esa legislación, aprobada por el Congreso en abril, obligaría a TikTok a desvincularse de su empresa matriz en China o ser prohibida en Estados Unidos.
En concreto, el texto dio a ByteDance nueve meses (hasta el 19 de enero) para encontrar un inversor de un país que no esté considerado como un "adversario" de Estados Unidos para vender sus operaciones en la nación norteamericana. De lo contrario, la aplicación tendría que dejar de operar en el país.
El Gobierno de Joe Biden y congresistas de los partidos demócrata y republicano temen que el Gobierno chino pueda obtener de ByteDance información sobre los usuarios en Estados Unidos y usar su influencia sobre la opinión pública estadounidense manipulando lo que los usuarios ven en la aplicación.
Sin embargo, en la audiencia de hoy, el abogado que representa a TikTok, Andrew Pincus, afirmó que esa red social está comprometida a proteger los datos de sus usuarios y que el Gobierno de EE.UU. no ha demostrado que la aplicación suponga un riesgo para su seguridad nacional.
Además, Pincus afirmó que la ley viola la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que protege la libertad de expresión.
Si se prohíbe TikTok, las principales tiendas de aplicaciones, como App Store de Apple y Google Play, se verán obligadas a retirar la plataforma de sus catálogos. Esto impediría que los usuarios puedan descargar la aplicación o recibir actualizaciones, dejando a millones de estadounidenses sin acceso a la popular red social.
Aunque la ley establece como fecha límite el 19 de enero para que ByteDance venda sus operaciones en EE.UU., Biden tiene la facultad de prorrogar este plazo. Si certifica que la compañía está realizando avances significativos hacia una venta, podría extender el periodo hasta tres meses adicionales, otorgando más tiempo para resolver la situación.
El caso podría ser recurrido ante el Tribunal Supremo. Por eso, tanto TikTok como el Departamento de Justicia han solicitado a la corte de apelaciones que emita un fallo antes del 6 de diciembre, lo que permitiría al Supremo considerar cualquier apelación antes de que entre en vigor la prohibición.
El proceso judicial tiene lugar en la recta final de las elecciones del 5 de noviembre. Las campañas de los dos candidatos, tanto el republicano Donald Trump como la demócrata Kamala Harris, están activas en TikTok, en un intento de cortejar a votantes jóvenes.