Indicó que los límites de almacenamiento en el embalse, tras las altas precipitaciones pluviales que se registran, obligan a tomar medidas precautorias en dicha municipalidad, 224 kilómetros al norte de Monterrey.
La presa “Venustiano Carranza” del municipio de Juárez, Coahuila, con capacidad ordinaria de mil 322 millones de metros cúbicos, alcanza en este momento los mil 400 millones.
Por ello se abrirán sus compuertas para el desfogue de líquido por el “Salado”, cuya creciente se podría desbordar y afectar zonas rurales y de la cabecera municipal de Anáhuac.
“El problema es que no hay energía eléctrica en esa área, es necesario abrir 26 compuertas, para extraer dos mil 500 metros cúbicos por segundo, aunque hasta ahora sólo se han abierto ocho y se extraen 750 metros cúbicos por segundo”, explicó.
Aunado a lo anterior, por las lluvias que azotan a esta región noreste del país, ingresan al citado embalse cinco mil metros cúbicos por segundo, lo cual aumenta el riesgo de colapsamiento y genere inundaciones en Anáhuac, toda vez que el río “Salado” nace en la presa “Venustiano Carranza”, conocida también como “Don Martín”.
Por ello, desde los primeros minutos de hoy se procedió a alertar y exhortar a unas cuatro mil 300 familias a dejar sus hogares, para que se trasladen a albergues de escuelas en zonas altas de ahí mismo u otros refugios temporales dispuestos en el municipio vecino de Lampazos e incluso en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Con el apoyo de Protección Civil del Estado, el municipio de Anáhuac procede al desalojo, aunque gran parte de sus habitantes dejan sus hogares por medios propios e incluso intentar cruzar la frontera hacia Estados Unidos.