Ley de Ingresos será por 4 billones 694 mil 677 mdp

La Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular, con 375 votos a favor, 33 en contra y cuatro abstenciones, la minuta del Senado por la que se expide la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 2015, misma que contempla un monto de 4 billones 694 mil 677 millones 400 mil pesos, para el Presupuesto de Egresos del próximo año.

Al fundamentar el dictamen, el diputado Damián Zepeda Vidales (PAN), presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, explicó que la colegisladora efectuó cambios al artículo 1o. en su carátula, al párrafo sexto de ese mismo artículo y a la fracción primera del artículo séptimo de la Ley de Ingresos aprobada por la Cámara de Diputados.

La minuta devuelta, indicó, registra una disminución de 8 mil 273 millones 600 mil pesos en comparación con lo aprobado por los diputados (4 billones 702 mil 951 millones de pesos), derivado del ajuste al precio de barril de petróleo, que pasó de 81 a 79 dólares y un tipo de cambio de 13 a 13.4 pesos por dólar.

Sin embargo, añadió, el monto aprobado, tanto por el Senado de la República como por la Cámara de Diputados, es superior en 18 mil 440 millones 300 mil pesos, a la propuesta original del Ejecutivo, que era de 4 billones 676 mil 237 millones 100 mil pesos.

La minuta que hoy se recibe, dijo, considera modificaciones en diversos rubros, derivado del ajuste al precio del barril de petróleo. Lo anterior, abundó, dio origen a que la tabla de ingresos del artículo primero fuera recalculada, generando cambios entre los cuales destacan la actualización del pronóstico de precio ponderado acumulado del barril de petróleo crudo de exportación, ajustándolo de 81 a 79 dólares.

En este sentido, agregó, los ingresos del gobierno federal pasan de 2 billones 906 mil 192.4 millones a 2 billones 904 mil 11.8 millones, lo que significa una reducción de 2 mil 180 millones de pesos respecto del proyecto enviado por los diputados al Senado.

Respecto a los ingresos petroleros, señaló que la Cámara de Diputados aprobó una estimación de un billón 219 mil 245 millones, pero, derivado de los ajustes hechos por la colegisladora, pasa a un billón 195 mil 806 millones de pesos; 23 mil 439 millones de diferencia. “Es importante mencionar que los ingresos de Pemex se reducen en 6 mil 93 millones, quedando en 439 mil 706 millones de pesos”.

Añadió que las transferencias al Fondo Mexicano del Petróleo también se reducirán y quedaría con un monto estimado de 745 mil millones de pesos.

Para hacer frente a la reducción de los ingresos petroleros, agregó, es necesario ajustar el déficit de las empresas productivas del Estado, restándolo del endeudamiento interno del gobierno federal.

Refirió que gracias a que el IEPS a gasolinas y diésel se ajusta a la alza, la recaudación federal participable para las entidades federativas se incrementa en 2 mil 503 millones, para quedar en 2 billones 312 mil 918 millones de pesos.

“En el mismo sentido, la colegisladora ajustó los montos de las transferencias mensuales de Pemex al Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo por concepto de IEPS de los contratos de utilidad compartida, modificando la tabla que contiene el artículo 7 del proyecto, a fin de que Pemex transfiera al Fondo un monto de 424 mil 121 millones de pesos, lo que es menor en 10 mil 736 millones de pesos a lo antes acordado”, concluyó.

Al hacer uso de la palabra para fijar el posicionamiento de su grupo parlamentario, el diputado del PRD, Carol Antonio Altamirano, aseveró que el ajuste a la Ley de Ingresos remitido por el Senado de la República no debe presionar ni acotar las decisiones de la Cámara de Diputados, pues “fue el gobierno federal quien lo avaló, incluso excediendo sus facultades constitucionales”.

En consecuencia, afirmó, el poder Ejecutivo debe asumir el costo de esta decisión, ajustando el gasto de las dependencias federales, “que poseen reservas suficientes” y porque “está obligado a adoptar políticas en materia de austeridad”, pues, acusó, algunas de sus áreas observan egresos innecesarios o excesivos.

El diputado de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal Ávila, señaló que la Ley en comento “no refleja la situación de emergencia en la que se encuentra México”, ya que a pesar de que el ajuste al precio del barril de petróleo es por sentido común, el “problema de fondo” se encuentra en el modelo económico implementado en nuestro país.

“Las políticas fiscal, monetaria y cambiaria, en las últimas tres décadas, han sido causa del lento crecimiento económico. Fallan en garantizar el uso de la capacidad productiva y afectan el potencial de crecimiento económico, al mantener un bajo el nivel de inversión pública, bajos salarios y depreciación del tipo cambiario”, acotó.

La diputada por el PT, Lilia Aguilar Gil, respaldó la modificación remitida por el Senado de la República en el sentido de volver congruentes los ingresos con el Presupuesto de Egresos de la Federación y los mercados internacionales, y para alcanzar un crecimiento del 3.7 por ciento, en lugar del 3.5 por ciento como se había estimado.

Con ello, añadió, la Ley de Ingresos será un instrumento fundamental para la política hacendaria en la perspectiva del precio del petróleo y su mercado internacional, para crear condiciones favorables y aceptables, obtener ingresos adecuados a la realidad e impulsar el crecimiento económico.

En contra de la minuta, se pronunciaron los diputados de Movimiento Ciudadano, Ricardo Mejía Berdeja, Zuleyma Huidobro González y Francisco Alfonso Durazo Montaño, además de Manuel Rafael Huerta Ladrón de Guevara, del PT.

Enfatizaron que el argumento de la SHCP, de que la Ley de Ingresos se sustentaba en la situación económica nacional y los beneficios de la reforma fiscal, “recibió su primer golpe”, ya que esta modificación hizo notar que las autoridades mexicanas “no se dieron cuenta de la baja del petróleo que en otras naciones ya se preveía”.

A favor del dictamen, se manifestó Fernando Belaunzarán Méndez (PRD), quién defendió que el ajuste de 81 a 79 dólares por barril “era por sentido común” dada la baja del precio del petróleo.