El diputado Raúl Nava indicó que ante el anunció de que 60 empresas solicitarán amparos contra dicha norma, urgió la comparecencia de los secretarios de Medio Ambiente, de Desarrollo Económico y del Instituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal.
Dijo que según el decreto, esas instancias del gobierno local deberán implementar programas para que las empresas productoras de bolsas y empaques de plástico, puedan adecuar las tecnologías a sus sistemas de producción.
El Instituto de Ciencia y Tecnología tenía hasta el 18 de diciembre para crear un programa de asesoramiento para el desarrollo de sustitutos del plástico, "pero ante la inconformidad de los empresarios, parece que estas obligaciones no han sido cumplidas", agregó.
Nava indicó que si bien el decreto entró en vigor el 19 de agosto de 2008, será hasta febrero de 2010 cuando el programa de sustitución se lleve a cabo, y las primeras sanciones a quien no cumplan se interpondrán hasta el 18 de agosto del 2010.
Sin embargo, admitió que empresas como Comercial Mexicana, ya introdujeron bolsas biodegrables cuyo proceso de descomposición requiere dos años, y lanzará bolsas fabricadas a base de yute y fibra de trigo, cuyo lapso de descomposición es de 115 días.
Otras, como Walmart y Home Depot, ya utilizan bolsas oxidegradables; Soriana bolsas biodegradables que se incorporan a la tierra en un ciclo de 12 a 24 meses, mientras que OXXO ha declarado su disposición para incorporar bolsas químicamente modificadas, añadió.
Nava afirmó que esto es un avance pues según la Semarnat, del total de bolsas que se elaboran en el país, el 28 por ciento se distribuye en 38 cadenas de supermercados, y el 72 por ciento se comercializa en almacenes de ropa, de regalos y negocios dedicados a la venta de bolsas al mayoreo.
Sin embargo, el gobierno federal sigue ajeno a los daños ambientales ocasionados por la producción de bolsas de plástico, ya que por cada tres mil millones de bolsas se refinan cinco millones de toneladas de crudo.
A pesar de ello México ocupa el lugar número 17 en el consumo nacional de plástico a nivel mundial y el segundo lugar en Latinoamérica con un consumo aproximado de tres millones de toneladas, sostuvo el legislador del PVEM.