En entrevista, el profesor del Instituto Tecnológico de Felipe Carrillo Puerto, Julián López Martínez, expuso que se trata de un proyecto que permite identificar plantas y árboles que pueden contener tintes, colores y sobre todo las concentraciones que se deben aplicar en la ropa.
Es una técnica milenaria que se pretende rescatar después de que los colores artificiales la desbancaron, agregó.
López Martínez refirió que ese proyecto se coordina con grupos productivos artesanales del centro de Quintana Roo y estudiantes del Instituto Tecnológico, y cuenta con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El plan se presentó la víspera en una de las primeras sesiones de la V Asamblea del Fondo para el Medio Ambiente Mundial que se celebra en esta ciudad y en la que los asistentes buscan obtener parte de cuatro mil 433 millones de dólares que los países del Foro Global Environment Facility asignarán a programas ecológicos.
Naokop Ishhi estuvo en una de las sesiones y se dijo muy contenta con lo que le mostraron estudiantes de la institución, quienes vistieron ropa elaborada por personas de la región y con la coloración que se pretende aplicar con medios naturales.
En breves palabras que concedió al salir del encuentro, dijo que este tipo de proyectos de conservación de las tradiciones son los que se pretenden fomentar en todo el mundo.
Por su parte, López Martínez detalló que el proyecto tiene varias etapas, como catalogar las plantas, determinar las concentraciones y los tonos que se podrían lograr.
Asimismo, refirió que ya se empezó a promover su uso en artículos en específico, desde ropa de uso diario y sobrecamas.
La idea es trabajar sobre algodón, pero en una segunda etapa se pretende extenderlo a otras telas y sobre todo abarcar mas tonos hasta alcanzar el teñido de hilo para poder elaborar ternos (vestidos típicos), abundó.