De acuerdo con la agencia de viajes en línea, Almundo.com, la ocupación hotelera aumento 76 por ciento en la Ciudad de México, Michoacán, Puebla, Guanajuato y Aguascalientes.
En un comunicado, explico que en la capital del país, uno de los puntos de mayor atracción es la escenificación en el embarcadero de Cuemanco, Xochimilco, de una de las leyendas más populares en México, “La Llorona”, con pasos nocturnos en trajineras.
Agregó que en Michoacán, los poblados purépechas que rodean el lago de Pátzcuaro y su isla Janitzio, suenan una campana toda la noche en la entrada del panteón para convocar a las almas; todos visten de negro, y adoran a los muertos con cantos purépechas, implorando por su descanso y también por la felicidad de los vivos.
Almundo.com reseñó que en el estado de Puebla, Huaquechula es una comunidad indígena donde se preparan monumentales altares que son una mezcla de tradiciones prehispánicas y católicas.
Mientras que en San Miguel de Allende, Guanajuato, en la celebración del día de los muertos participan por igual locales y turistas que se disfrazan de calaveras y catrinas para repartir dulces a todos los niños en su recorrido.
Añadió que no deben faltar los cuatro elementos básicos de la naturaleza: Tierra, haciendo caminos para la fácil llegada de las ánimas y representada también en los frutos que ésta nos da; aire, representado en el movimiento, se usa papel de china, llamado "papel picado" en color morado y naranja.
Así como el agua, para que el ser querido calme su sed después de tan largo viaje y fuego, representado por velas que señalarán el camino al altar, además del copal y sal para la purificación y flores de cempasúchil para facilitar la llegada y el camino de estas ánimas.
Finalmente, dijo que en Aguascalientes, el Festival de Calaveras es uno de los atractivos donde la ciudad se convierte en una pintoresca celebración a los difuntos, que surge con el objetivo de rescatar y preservar las tradiciones del Día de Muertos, donde además se rinde homenaje a uno de los artistas plásticos con reconocimiento a nivel mundial: José Guadalupe Posada.