Subrayó que dicha reforma debe permitir que el sistema internacional responda realmente a las necesidades de los países, no sólo en términos de bienestar y desarrollo, sino también de paz, seguridad y cooperación en beneficio de todos; y de manera destacada en el ámbito del medio ambiente.
"La reciente crisis económica y financiera nos ha dejado como lección, la urgencia de establecer las bases de una economía global más justa y más sana, para lo cual deben reformarse las instituciones financieras internacionales".
Esto, puntualizó, con el propósito de reflejar las realidades económicas actuales y estar mejor equipadas para hacer frente a las crisis globales".