En entrevista, el experto en estudios de opinión advirtió que ejercicios de ese tipo son como si le preguntaran a Mhoni Vidente quién va ganar la elección presidencial del 1 de julio próximo.
En el caso de la empresa Massive Caller, no hay manera de saber si es verdad o no de lo que la acusan, porque hacer sondeos por teléfono no son ni siquiera encuestas, toda vez que carece de un método replicable.
"¿Qué pasa con las telefónicas y con las digitales que no son replicables entonces entran en este tipo de situación, cómo sabes que no las inventó?, no lo sabes, ni siquiera son encuestas”, aseveró.
Manipular encuestas contamina el ambiente electoral y es algo que no debe existir, por lo que los medios de comunicación deben revisar cuál encuesta es seria y para dejar dejar de darle espacios a las qiue no lo sean, enfatizó el directivo.
Advirtió que el verdadero problema es que los medios les den espacios a material de ese tipo y quienes las contratan , ya que ese tipo de sondeos no sirve para realizar encuestas electorales; en todo caso, ironizó, mejor habría qué preguntarle todos los días a Mhoni Vidente.
El Instituto Nacional Electoral (INE), lamentó, no puede intervenir porque los sondeos por teléfono no están regulados, toda vez que carecen de bases de datos y cómo entregarían algo inexistente.
Insistió que no hay forma de saber si están falsificando los números, pero insistió que el método telefónico no sirve para hacer encuestas electorales.
"Si te metes a la página de la empresa en comento y dice le atinamos a 11 de 12, ya cuando un investigador habla de atinarle quiere decir que no es investigador, sino que está haciendo negocio", sostuvo.
En cuanto si hay forma de saber si el Partido Acción Nacional (PAN) y Ricardo Anaya pagaron por ese sondeo, dijo que no es un delito que alguien le pague a un curandero en lugar de un médico; es culpa del enfermo. “Vender eso como encuesta es lo que no vale".