En un comunicado, este organismo internacional señaló que se ha unido a diversas acciones de solidaridad y apoyo para las personas afectadas por los sismos de este mes.
Puntualizó que dichas acciones se basan en la convicción de que la educación es pieza clave para la construcción de los países, y por ello desarrollará acciones, con el fin de apoyar y aprender de la emergencia que se ha vivido, todas apegadas a su misión como organismo internacional.
Entre las acciones que impulsará están la reimpresión de materiales didácticos de apoyo para niños y niñas, que serán distribuidos directamente a comunidades escolares afectadas; comenzará la campaña “Reconstruyamos escuelas”, con la adopción inicial de seis planteles, a desarrollarse en colaboración con autoridades educativas estatales y las comunidades escolares.
También indicó que desarrolla un modelo de prevención y de atención postdesastre en comunidades escolares, atendiendo a las recomendaciones del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030.
Indicó que ha desarrollado un modelo de intervención escolar que contribuya al logro de los objetivos establecidos en el tercer pilar del marco integral de la seguridad escolar de la Alianza Global para la Reducción del Riesgo de Desastres y Resiliencia en el Sector Educativo.
Además, ha organizado una conferencia sobre educación en situaciones de emergencia, e impulsa la creación de una red latinoamericana para compartir recursos educativos eficaces con el fin de atender a la población escolar durante situaciones de emergencia.
Asimismo, con el objeto de desarrollar competencias en educación para la reducción de riesgo y la resiliencia, ha diseñado cursos a distancia masivos y abiertos para maestros, voluntarios y padres de familia.
Ha creado y formado un grupo de voluntarios en la comunidad CREFAL, para la atención de comunidades escolares en situación de emergencia, y gestiona recursos ante el sector privado para la recuperación de espacios escolares.
De igual manera ha establecido alianzas con otros organismos internacionales, organizaciones de la sociedad civil e instituciones académicas para apoyar a las comunidades escolares afectadas.
“Para nosotros, las escuelas son el espacio donde se retomará la vida cotidiana de las comunidades afectadas; son el lugar privilegiado para construir el futuro y, sobre todo, el lugar donde las niñas y los niños pueden compartir sus experiencias, aprender de ellas y sentirse también reconfortados y protegidos”, resaltó.