Al presentar su Indice de Final de Quincena, la directora de Estudios Cuantitativos de la firma, Isabel Campero dijo que esta diminución obedece a una mayor desempleo y al alza en los precios de los productos, factores macroeconómicos que se están sintiendo en el bolsillo de "la gente de a pie".
En conferencia de prensa, explicó que según el estudio el recorte de gastos como medida para enfrentar esta situación es cada vez más recurrente, al pasar de 33 por ciento en enero pasado a 43 por ciento a noviembre; los rubros de entretenimiento, ropa y calzado registraron el mayor ajuste.
Derivado del menor rendimiento de los sueldos, agregó que también aumentó el atraso en pagos, que pasó de 20 a 26 por ciento en el mismo periodo, sobre todo en servicios como agua, luz y gas.
Además, los créditos o préstamos también fueron más socorridos para poder pagar los gastos de la quincena, acudiendo sobre todo a familiares y amigos, y luego a los bancos o las empresas en donde las personas laboran, dijo Campero.