Crisóforo Maldonado Jiménez, el “Bocinas”, presunto líder de “Los Rojos”, ingresó con heridas de bala en el abdomen al hospital Médica Sur, el pasado 11 de diciembre, donde fue ejecutado en el área de terapia intensiva por dos hombres disfrazados de médicos.
En declaraciones a la prensa en San Lázaro, Mancera dijo que, al ingresar al hospital, no había indicios de que Maldonado Jiménez estuviera vinculado a la delincuencia, ya que fue trasladado del estado de Morelos en una ambulancia privada.
Ingresó al hospital como una víctima, en el mismo carácter de una persona lesionada, señaló.
“Se da este aviso de que hay una persona lesionada, que es una víctima; no hay ningún dato que te apunte al hecho de que era alguien vinculado con la delincuencia, ni era un evento que no fuera lo que refirieron los familiares”, dijo el jefe de gobierno capitalino.
La familia informó que Maldonado Jiménez se dedicaba a la construcción y hace tres años fue víctima de un secuestro.
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) revisa los videos de cámaras de seguridad instaladas dentro del hospital y las de calles aledañas como parte de la investigación para esclarecer el homicidio.