Sin embargo, desde la tarde de ese día, la ayuda humanitaria de los capitalinos salió a las calles, miles de personas corrían a la escuela de donde se encontraban sus hijos, a sus hogares. El transporte dejó de funcionar, un mar de gente inundó las vialidades.
Al conocer la magnitud del movimiento telúrico y otros ver caer edificios completos, generó caos y angustia; volver a respirar y sentir que estabas vivo ya era ganancia, porque podrías contarlo.
Desde ese momento, el Gobierno de la Ciudad de México implementó acciones y programas para brindar auxilio, apoyo emocional, psicológico y atención integral a las personas que más lo necesitaban, como consta en la versión digital Vive CDMX en su edición de este mes.
Da cuenta de la solidaridad de brigadistas, voluntarios, rescatistas, donadores, médicos y demás especialistas que desde su trinchera siguen contribuyendo al restablecimiento de la vida en la capital del país.
En este mes, dedica su número al sismo del 19 de septiembre, que desde ese día, el gobierno local abrió varios espacios para recolectar víveres, medicamentos, ropa y herramientas para los rescatistas y damnificados en la capital y en otros estados del país que sufrieron afectaciones.
En tanto, en los centros de acopio instalados en 10 delegaciones las muestras de apoyo aún continúan. En el Zócalo capitalino, se recibieron artículos de higiene personal, alimentos no perecederos, cobijas y sobre todo medicamentos.
En la Casa Refugio Citlaltépetl, funcionó además como zona de descanso para voluntarios, brigadistas y rescatistas; el Instituto de la Juventud (Injuve) se organizaron brigadas de jóvenes para apoyar en las zonas más afectadas.
También se instalaron estos centros en la Puerta de Los Leones de la Secretaría de Medio Ambiente y Protección Civil; se abrieron espacios especiales para animales de compañía en el Centro de Transferencia Canina.
El Gobierno de la Ciudad de México desplegó a más de 25 mil elementos de la Secretaría de Seguridad Pública para patrullar la zona de desastre; el Sistema de Transporte Colectivo Metro dio servicio para llevar consigo bicicletas.
Se dispuso de tres mil 600 brigadistas para la inspección de inmuebles; se juntaron casi 100 mil artículos de primera necesidad; se entregaron 50 mil productos en los tres primeros días posteriores al sismo.
El servicio en el Metro y Metrobús fue gratuito en toda la red; se suspendió el servicio de Ecopar en las zonas afectadas y se instalaron 25 centros de acopio en total.
También se brindó apoyo psicológico, donde especialistas del Hospital de las Emociones recorrieron calles, albergues y planteles del Instituto de Educación Media Superior (IEMS) para brindar terapias gratuitas.
Las brigadas del Instituto de las Mujeres local ofrecieron apoyo psicológico a través de consultas telefónicas en el número 55122836.
A través del Centro de Atención Telefónica Medistancia se atendió a personas afectadas emocionalmente después del sismo y la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades, puso a disposición expertos en medicina tradicional para el bienestar emocional y físico.
Sin duda, la labor de los comedores comunitarios, de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) fue una de las prioridades del gobierno capitalino, ya que durante las labores de rescate, estas unidades entregaron comida gratuita a las zonas más afectadas por el terremoto alimentando a los damnificados, rescatistas y voluntarios. Atendieron a los más de 30 albergues de la Ciudad de México, donde repartieron hasta 10 mil raciones de comida al día.
La Ciudad de México recibió además la ayuda de diversos países que enviaron ingenieros expertos en valoración de inmuebles, médicos y personal especializado para realizar labores de rescate.
Por región, de Latinoamérica, Guatemala envió a 47 elementos; Honduras a 36 expertos en búsqueda y recate; Panamá a 35 integrantes del equipo Usar Panamá y cuatro binomios caninos; Colombia a 30 elementos y dos binomios caninos.
Mientras que de Ecuador llegaron 30 elementos; El Salvador, 25 elementos; Venezuela 20 elementos y dos binomios caninos; Chile, 18 topos y dos binomios caninos; Costa Rica y Perú, mandaron a expertos para la valoración de daños estructurales.
A nivel internacional, la ayuda llegó de Japón, que envió a 72 elementos del Equipo Japonés de Auxilio para Desastres; Israel a 70 soldados y expertos en evaluación de inmuebles; España a 54 elementos y cuatro binomios caninos; Suiza, cinco elementos expertos para valoración de daños estructurales.
Alemania contribuyó con dos expertos para valoración de daños estructurales de la Agencia Federal de Ayuda Técnica; Estados Unidos a 60 elementos, 10 entrenadores y cinco binomios caninos.