El compromiso se refiere a 55 aparatos de la serie 900 del avión, aunque el contrato incluye la posibilidad de que la compañía los cambie por otros de mayor tamaño, de la serie A350-1.000, precisó el fabricante en un comunicado.
Con este pedido, Lufthansa, "el mayor cliente y operador de Airbus entre aerolíneas", ampliará y modernizará su flota de largo alcance, agregó.
El contrato se produce seis meses después de que la aerolínea germana decidiera optar exclusivamente por una flota de aviones de un único pasillo del fabricante europeo.
Solo en este año, Lufthansa ha encargado 125 aviones a Airbus, más que en ningún año anterior y si se añaden los pedidos anteriores la cifra es de 232, uno más que la actual flota de Airbus en servicio por la compañía.
El vicepresidente ejecutivo de Gestión de Flota del grupo Lufthansa, Nico Buchholz, aseguró que el A350 "se ajusta a las necesidades de la compañía en cuanto a tamaño y autonomía y será clave para modernizar la flota reduciendo significativamente los costos operativos y el impacto medioambiental".
El director del área de clientes de Airbus, John Leahy, por su parte, consideró que Lufthansa "se beneficiará de la última tecnología y de los más modernos niveles de eficiencia, una cabina más ancha, una gran flexibilidad operativa y un ahorro de costos".
Con este pedido, Lufthansa conforta su puesto de principal cliente de Airbus.
La aerolínea alemana anunció recientemente un pedido de 100 aparatos de la familia A320.
