“Esta cumbre debería servir para asumir que el mayor reto común es la lucha contra la pobreza y la desigualdad, un elemento que caracteriza a la región. Cualquier política o estrategia que se adopte debe vincularse a ese objetivo, más aún si se trata de energía verde y transición ecológica”, afirmó el director de incidencia política de Ayuda en Acción, Alberto Casado.
Uno de los retos que serán abordados en el encuentro internacional, programado esta semana en Los Ángeles, será el diseño y adopción de compromisos que sitúen a los países en una posición más favorable de cara a los "cambios que promuevan un futuro más inclusivo y sostenible".
“Hoy más necesario que nunca es avanzar apostando por una economía verde y circular que no deje a nadie atrás”, señaló la organización.
Con las consecuencias de la pandemia como telón de fondo, sumada a una crisis alimentaria cada vez más intensa y profunda derivada de la guerra en Ucrania, Ayuda en Acción enfatiza en la necesidad de abordar las estrategias de adaptación incorporando la existencia de desigualdades estructurales entre estados.
“Tememos una repercusión directa en cuanto a brechas y acceso en igualdad y equidad a sus derechos por parte de la población más vulnerable”, apuntó Casado.
Según la organización no gubernamental, la pérdida de espacios y recursos naturales, así como su distribución, además de la falta de gestión eficiente de residuos y planificación para enfrentar el cambio climático son algunos de los puntos que llevará a la cumbre internacional.
"Todas estas cuestiones, hasta ahora, han dejado en desventaja a las poblaciones que viven en situación de mayor pobreza y vulnerabilidad, y de manera muy especial a las poblaciones indígenas y campesinas", señaló en un comunicado.
Entre los temas clave para la cumbre están una declaración conjunta sobre migración, ahora que está en aumento el flujo a nivel regional, y relanzar la recuperación económica tras el impacto causado por la pandemia de la covid-19.
La Cumbre de las Américas reúne desde 1994 y cada cuatro años a los jefes de Estado y de Gobierno del continente americano para discutir políticas comunes y buscar soluciones para los problemas de la región.
Sin embargo, Estados Unidos confirmó este lunes que no invitó a Cuba, Nicaragua y Venezuela a la Cumbre por la situación de la democracia y los derechos humanos en esas tres naciones, dijo a Efe un alto funcionario estadounidense.
Además, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó hoy que no asistirá al encuentro y que enviará como representante al canciller, Marcelo Ebrard.