"Si realmente queremos evitar que Putin sea muy rico a largo plazo, debemos invertir en energías renovables y debemos hacerlo rápidamente", dijo Timmermans a los ministros de Energía y Medioambiente de los países de la UE en un consejo informal a puerta cerrada celebrado en Amiens, según la transcripción de su intervención difundida por la Comisión Europea.
El vicepresidente del Ejecutivo comunitario insistió ante los responsables climáticos de los Estados miembros que la solución sostenible para abaratar la energía son las fuentes de generación propia renovable, que además de contribuir a la descarbonización de la economía reducirán las importaciones de hidrocarburos en la UE.
"Si realmente quieren asegurarse de que puede proporcionar energía estable y asequible a sus ciudadanos, las energías renovables son la respuesta", aseguró Timmermans.
El político neerlandés defendió una de las propuestas climáticas de la Comisión que menos aceptación tiene entre los Estados miembros y en el Parlamento Europeo, que pasa por extender el sistema de comercio de emisiones de CO2 conocido como ETS al,, transporte y la calefacción.
Muchos países de la UE, entre ellos España, creen que esa medida podría encarecer el precio que pagan los ciudadanos para calentar sus hogares o para desplazarse, lo que podría generar rechazo ante la transición hacia una economía descarbonizada.
Timmermans reconoció la falta de aceptación de esa propuesta, pero aseguró que las organizaciones ecologistas están suavizando su rechazo inicial.
"Poco a poco se están dando cuenta de que esta podría ser una solución de un problema extremadamente complicado. Porque las emisiones en el transporte aumentan, no disminuyen, y la reducción del consumo de energía en los edificios se reduce, pero demasiado lentamente para alcanzar los objetivos que debemos conseguir", señaló.
Recordó también que esa propuesta incluye la creación de un fondo para ayudar a los consumidores vulnerables a asumir los previsibles aumentos de precio.