Climatizan invernaderos mexicanos con energía geotérmica

Debido a que en lugares como Mexicali, que tiene vocación agrícola, las temperaturas son extremas tanto en verano como en invierno, especialistas de la Universidad Politécnica de Baja California (UPBC) crearon un sistema para climatizar invernaderos por medio de energía geotérmica, obtenida a partir del calor del subsuelo.

Etiquetas: 

Del sistema, que fue puesto a prueba en esa casa de estudios, se obtuvieron ventajas tales como que las plantas se mantienen a la misma temperatura durante todo el día, por lo que se redujo en 50 por ciento el periodo del cultivo.

Las plantas y los frutos crecieron más que en un invernadero no climatizado y el proyecto ofrece un coeficiente de desempeño nivel 4, es decir, por cada kilowatt eléctrico invertido se producen cuatro kilowatts térmicos.

Abelardo Mercado Herrera, académico de esa casa de estudios y responsable técnico del proyecto albergado en el Centro Mexicano de Innovación en Energía Geotérmica y financiado con recursos de la Secretaría de Energía y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, dijo a la agencia informativa de este último, que para el desarrollo del sistema, se implementó un invernadero prototipo similar a un invernadero comercial.

La dimensión de éste es de mil 100 metros cuadrados, de los cuales 200 metros cuadrados están climatizados, mismos que alternan entre cultivo de pepino y tomate.

El suelo de Mexicali es idóneo tanto para la agricultura como para el aprovechamiento de la energía geotérmica de baja entalpía, pues apenas a dos metros y medio de la superficie se encuentran mantos freáticos y suelos arcillosos, ideales para este tipo de tecnología, porque permiten el contacto con el agua a muy poca profundidad.

Con base en estas características, Abelardo Mercado afirmó que prácticamente cualquier agricultor de esa localidad tendría las condiciones en el suelo para implementar el sistema de climatización, tal como lo comprobaron al instalarlo en la misma casa de estudios.

Los beneficios de mantener la temperatura en los cultivos que alternan entre tomate y pepino: la productividad se elevó en 40 por ciento, las plantas crecieron un metro y medio más, el número de frutos fue entre 30 y 40 por ciento mayor, además de que también el peso de los frutos incrementó.

De todas las ventajas obtenidas en el invernadero climatizado, la más importante fue la reducción de 90 a 45 días el periodo de desarrollo de las plantas para obtener la cosecha.

Refirió que este sistema cerrado es comparable al radiador de un automóvil, una vez que se le suministra agua ya no es necesario extraerla ni suministrar más, sino que circula y su funcionamiento es con energía eléctrica, inversión que se recupera y multiplica con la producción de energía geotérmica.

El proyecto para climatizar invernaderos inició desde 2014 como parte de las líneas de investigación impulsadas a nivel nacional por el Centro Mexicano de Innovación en Energía Geotérmica (Cemie-Geo) y desde entonces ha recibido un financiamiento de entre seis y siete millones de pesos.

Fuente: Notimex