Canadá pide a OMC consultas por prohibición de importar derivados de focas

"La caza de focas en Canadá es una actividad económica legal y la decisión de la Unión Europea de prohibir la importación de productos derivados de focas no está basado ni en ciencia ni en hechos", dijo el ministro de Comercio Internacional de Canadá.

El Gobierno canadiense anunció que ha solicitado a la Organización Mundial del Comercio (OMC) consultas sobre la decisión de la Unión Europea (UE) de prohibir la importación de productos canadienses derivados de la caza comercial de focas.

El ministro de Comercio Internacional de Canadá, Stockwell Day, dijo que Ottawa considera que la prohibición adoptada por la Unión Europea, y que entrará en vigor en agosto del próximo año, viola "las obligaciones comerciales de la UE".

"La caza de focas en Canadá es una actividad económica legal y la decisión de la Unión Europea de prohibir la importación de productos derivados de focas no está basado ni en ciencia ni en hechos", dijo Day a través de un comunicado.

Cada año, alrededor de 300 mil focas son cazadas en las aguas de la costa atlántica de Canadá en lo que constituye la mayor cacería de mamíferos marinos del mundo.

Organizaciones como el Fondo Internacional para la Protección de los Animales (IFAW, por su siglas en inglés) y la Sociedad Protectora de Animales de Estados Unidos han denunciado desde hace décadas la caza de focas por considerarla inhumana y han solicitado el boicoteo de los productos derivados de esa caza.

El pasado 5 de mayo, el Parlamento Europeo (PE) aprobó prohibir el comercio de productos derivados de las focas salvo cuando estos procedan de la caza tradicional que practican los inuit (los indígenas del Ártico) o de las capturas previstas para mantener el equilibrio de los recursos marinos.

La decisión fue aprobada por 550 votos a favor, 49 en contra y 41 abstenciones.

Pero el ministro canadiense encargado de los temas indígenas, Chuck Strahl, dijo que "la limitada exención a los inuit que la UE ha incluido en sus normativas no responde a nuestras preocupaciones".

La decisión del PE se produjo después de que el Panel de Salud y Bienestar Animal de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, en inglés) realizase un estudio sobre la caza en el que los científicos europeos concluyeron que las focas mueren de forma lenta y agónica porque no se aplican las normas elaboradas por Canadá.