El presidente de la Comisión Real sobre Respuestas Institucionales a los Abusos Sexuales, Peter McClellan, informó hoy a un grupo de apoyo a las víctimas que el Vaticano proporcionó algunos de los documentos solicitados, pero retuvo otros.
El Vaticano envió una respuesta escrita a la comisión, la de más alto nivel de investigación en Australia, señalando que documentos que reflejan deliberaciones internas de la Iglesia son confidenciales y no aptas para su publicación.
McClellan investiga hasta qué punto las autoridades eclesiásticas australianas siguieron órdenes de Roma para proteger a los sacerdotes acusados de abuso sexual a niños.
Leanie Sheedy, fundador de una red en australia de apoyo a las víctimas, acusó a la Iglesia católica de despreciar a la opinión pública australiana. "No me sorprende", dijo a la televisión ABC. "Siento que la Iglesia católica cree que está por encima de las leyes de Australia y probablemente del mundo".
"Es sólo una réplica de su comportamiento en los últimos 200 años en este país. Trata a la opinión pública australiana con desprecio y también a la comisión real", añadió.