"Felicitaciones por este acontecimiento histórico -señaló Trump-. Ahora mismo, están en televisión en todo el mundo, por lo que no se pongan nerviosas".
La llamada se produjo mientras Meir y Koch todavía se encontraban fuera de la Estación Espacial Internacional (EEI) en un paseo por la exosfera para reemplazar un control de carga de baterías de esa instalación.
Mientras, el mandatario estaba en la Sala Roosevelt de la Casa Blanca flanqueado por su hija y asesora presidencial, Ivanka Trump; el vicepresidente, Mike Pence, y el administrador de la Agencia Espacial estadounidense (NASA), Jim Bridenstine.
La llamada comenzó con un "Estación (Espacial), es el presidente Donald Trump, ¿me oyen?"
Tras unos segundos, las astronautas respondieron "le oímos", a lo que Trump contestó: "Me estaba empezando a preocupar por ustedes, están en un sitio especial, el trabajo que están haciendo es genial, estamos encantados de hablar con ustedes".
"Esta es la primera vez que hay dos mujeres en un paseo espacial, haciendo un trabajo a gran altura, una altura a la que poca gente ha llegado", señaló el presidente, que calificó a las astronautas de "valientes".
Meir destacó, por su parte, que ella y Koch no desean atribuirse "un gran mérito".
"Muchas mujeres que nos precedieron han avanzado este camino -añadió-. Nos hemos entrenado por años para hacer este trabajo y estamos en una larga fila de científicas, ingenieras, astronautas, mujeres que nos precedieron".
Trump subrayó que ambas mujeres se encuentra en un lugar que pocas personas han experimentado y recordó que EE.UU. quiere volver a la Luna y después a Marte: "Creemos que la Luna es el mejor sitio para el lanzamiento a Marte".
La NASA ha pedido al Congreso un aumento de su asignación presupuestaria para acelerar el Programa Artemisa, que tiene proyectado enviar a un hombre y una mujer a la Luna en 2024.